Pájaros en la cabeza

Aún no sé por qué no consigo sacar alguno de tantos pájaros que hay en mi cabeza.

Y es que, al parecer, hay demasiados.

No sé, quizá les haya gustado el lugar y se han quedado a pasar una temporada.

Una temporada larga...

Pues ya que están ahí, que me ayuden en algo, ¿no?

Y además parece que les gusta la música, ya que es lo único que tengo en mente últimamente.

Me pondré a componer, guitarra en mano y micrófono en voz, a ver si me echan una mano.

No lo sé, quizás me ponga a tocar el piano, que tengo que quitarle el polvo.

A ver si me ayudan a escribir también, tanto aquí como en un papel, historias, reflexiones, canciones... incluso me atrevería con los poemas si están dispuestos.

Pero no pienso dejarles estar ahí arriba viviendo parasitariamente, no señor.

Que se pongan a hacer algo, yo no tengo tiempo ni ganas de hacer nada conmigo, como para encima malgastarlo en los pajarillos del copete.

Suficiente tengo ya con no saber nada sobre mí mismo, sobre lo que he de hacer conmigo ni sobre lo que quiero hacer.

Quiero que se desvanezcan todas las ilusiones vanas, si no van a materializarse de una manera u otra, o en un momento u otro.

Necesito desmentiras, necesito revelaciones, necesito golpes fríos sobre los lados de la cara si es necesario para darme cuenta de que todo lo que imagino es sólo eso, imaginaciones, utopías, pensamientos etéreos que se pierden en el infinito de lo que es el ingenio humano; y, de los cuales muchos nunca se mezclan con la razón.

Necesito vivir en la realidad del mundo corpóreo.

Necesito la verdad.

RodNonconformist

Duodécima entrada, a 1 de febrero de 2011


Fotografía: RodNonconformist en Aker Brygge, Oslo, Norge